El profundo diálogo entre el ser humano y la naturaleza se traduce en una conversación hecha de miradas y reflejos en que la tierra y el ser humano —caras gemelas— se espejan el uno en el otro y colaboran creando una sinergia perfecta.
En el intercambio constante con el medio ambiente que nos rodea, la naturaleza nos demuestra que formamos parte de un sistema vital intrincado y maravilloso. Un encuentro armonioso, manifestado a través de movimientos grandiosos y cíclicos, que dan forma a la estructura misma de la colección Gemini, inspirada en los flujos naturales entre la tierra y el cielo.